Informaci�n de ruta

Descripción de la ruta: RESUMEN:
Cantalojas, caseta de información del Parque Natural de la Tejera Negra, puente sobre el río Lillas, Collado del Hornillo (1.625), entrada al Parque Natural, refugio forestal, hayedo, bajada hasta el arroyo, puente río Lillas, Cantalojas.

DETALLE:
Km 0 CANTALOJAS.
Se sale del pueblo por el nuevo camino rural que lleva a Majaelrayo. Tras dejar a la derecha un hostal y otras modernas edificaciones, se avanza en medio de extensas praderas, tan aprovechadas por la tradición ganadera de la zona.
Km 2,7.
Bifurcación. Antes de llegar a una curva a la izquierda y junto a la caseta de información del parque natural de Tejera Negra, abierta sólo de julio a septiembre, se abandona el camino de gravilla blanca para seguir recto en dirección al hayedo, como indica una rústica pero poco visible señal. La pista forestal, con abundantes baches, discurre por lo alto de un alomado terreno; enseguida desciende hasta el mismo lecho del río Lillas y lo cruza por un puente recientemente reformado. A partir de aquí comienza a remontarse el valle. La subida, aunque constante y sin tregua, no llega a hacerse pesada.

Km 7,3.
Sale a la derecha un desvío a la zona de acampada; hay que continuar de frente. La pista empeora por momentos, sobre todo en época de lluvia. El constante trasiego de visitantes en vehículos todoterreno ha destrozado el firme y los profundos surcos que han trazado no permiten distracción.
Más adelante el bosque se abre y permite ver el valle del río Lillas circundado por imponentes y verticales crestas, cuyas paredes a medo de precipicios se desploman hasta sus mismas fuentes.
La pista, en un viraje, pasa a la vertiente meridional de la divisoria de aguas y se asoma al valle del río Sorbe o de la Hoz. Tras un fuerte y corto repecho se corona el último falso collado y, en ligera bajada, se llega a una explanada.

Km 15,6 COLLADO DEL HORNILLO.
Es el punto culminante del recorrido, a 1.625 metros de altitud. Una portilla de madera da acceso al parque natural. Las hayas, vestigios de un antiguo bosque atlántico mucho más extenso, son las protagonistas; trepan las umbrías de las gargantas más frescas en busca de condiciones favorables para su supervivencia.
Entremezcladas con robles y pinos de repoblación, forman una masa arbórea que en otoño tiñe las laderas de una gran variedad cromática. La pista pierde ahora altura, descendiendo suavemente por el barranco del arroyo del Hornillo. junto a una casa forestal crecen grupos aislados de tenaces hayas, que poco más adelante dejan paso definitivamente al robledal y el pinar. Inmediatamente después de salir del bosque, se alcanza una loma entre praderas.
En dirección a cuatro árboles solitarios, hay que seguir a campo traviesa en busca de las redadas que se adivinan 30 metros más adelante; pronto se transformarán en un buen camino.
Tras vadear un arroyuelo, se emprende una empinada cuesta complicada por las piedras sueltas; los últimos tramos, de unos 70 metros, se superarán empujando la bicicleta. A partir de ahora se faldea la ondulada orografía de las laderas y, en un rosario de revueltas, se desemboca de nuevo en el puente sobre el río Lillas. Una subida más y, en escasos kilómetros, se llega al pueblo.
Provincias: Guadalajara
Cartografía: Ver mapa de la zona
Ciclabilidad: 100%
Desnivel acumulado: 518 metros aprox.
Recorrido: 25 km.
Cotas alcanzadas: Collado del Hornillo (1.625)